miércoles, 15 de abril de 2015

LOS PADRES


LOS PADRES
 Por Alberto Hernica Valencia

 Cuando éramos pequeños y llegaba una queja a casa por parte de maestro, profesor o cualquier otra autoridad docente… se nos caía el pelo. Y ni que decir tiene que jamás se nos ocurría hablar mal de ninguno de ellos, ni decir que nos tenían manía ni nada por el estilo, porque entonces el castigo era doble, primero en el instituto, y luego en casa. Cómo ha cambiado la cosa.
Hoy día si el alumno suspende, la culpa es del profesor, y muchos padres no tienen inconveniente alguno en afirmarlo a los cuatro vientos, incluso delante de hijos y docentes. Por supuesto, el profesor le tiene manía (aunque le hayan quedado nueve, pues seguramente los nueve profesores lo tienen entre ceja y ceja). Si se ha castigado al niño, hay que poner el grito en el cielo, ¿quién es el profesor para castigar a nadie? Si una vez perdidos los nervios el docente eleva un tanto su tono de voz al dirigirse al alumno, es un acto poco menos que denunciable…y así tantas y tantas cosas que antaño nos habrían hecho llevarnos las manos a la cabeza pero que actualmente están a la orden del día.
Muchos padres ya no vienen dispuestos a echar la bronca a sus hijos y disculparse ante el profesor, sino justo lo contrario, esperan que el profesor admita que se ha equivocado y que les reconozca lo buenos que son sus vástagos. Lo único que les importa es que aprueben, a cualquier precio, no importan nada actitudes, comportamientos, hábitos de estudio ni semejantes “patrañas” (como seguramente ellos consideran todas estas cosas).
Yo me hice profesor porque me gustaba enseñar. En seguida me di cuenta de que además de enseñar debía educar. Y por último he llegado a la conclusión de que no sólo hay que educar a los niños, sino también a los padres (y esto es lo difícil).
Por supuesto, nunca hay que generalizar, y de vez en cuando te toca hablar con padres y madres de esos que te hacen sentir que tu trabajo merece la pena… gracias a Dios.



jueves, 9 de abril de 2015

ANTONIO MONTERROSO VISITA NUESTRO CENTRO




El pasado 23 de Marzo nos visitó el escritor y poeta visual, Antonio Monterroso (http://antoniomonterroso.jimdo.com/) dentro de las actividades que desde el plan de Familias Lectoras se planificó con el Departamento de Filosofía (se dedicaron tres sesiones de esta materia en relación con la visita). El  curso elegido fue 1º de Bachillerato, que ya conocía la obra de este autor y había trabajado un famoso poema visual de Monterroso en clase de Filosofía y Ciudadanía acerca de la verdad (si estáis interesados en conocer dicha actividad, pinchad en el siguiente enlace: http://pvenelauladefilosofia.jimdo.com/material-docente/actividades-para-el-aula/la-verdad/).

                                                    


                                               © del autor, todos los derechos reservados

Parte de la intervención de Monterroso giró en torno a cuestiones teóricas y prácticas sobre la poesía visual y de vanguardia, centrándose en su intervención, y en continuo diálogo con el alumnado, en las posibilidades de los libros de artista, que también están desarrollándose en el aula de filosofía.

(Un momento de la sesión con Antonio Monterroso)

No obstante, en esta ocasión el leitmotiv de la visita se centraba en la idea de laberinto en general y de Laberinto en Borges en particular. Ya que, previamente, al preparar la visita, se habían encontrado señales de indicación inservibles en el centro y precisamente, esta circunstancia azarosa, invitaba a transformar el sentido de las señales en un nuevo código poético/visual: “si, normalmente las señales sirven para no perdernos en el camino, estas señales inservibles, deberían ayudarnos a confundirnos en un laberinto”, fue alguno de los argumentos esgrimidos por invitado para provocar el pensamiento y la reflexión de los asistentes. Y así fue como fue naciendo la motivación en estos para realizar sus experiencias visuales. Algunos de sus trabajos, pueden verse a continuación:

 (Trabajo grupal. Obviamente la disposición está pensada y responde a un propósito)

(Cronológicamente, este fue el el primer trabajo del alumnado)

(Trabajo grupal)

Tiempo, de David Galván

(Trabajo Grupal)

Por otro lado, y gracias a otro golpe de suerte (¡no hay nada como el arte povera!, el arte pobre al que se refirió en alguna ocasión Monterroso para poner en valor la mirada del artista a la hora de encontrar una nueva metáfora o acierto poético, allí donde lo habitual es no ver nada más que materiales de desecho), que tanto apreciaban los surrealistas y los vanguardistas, de los que proviene la poesía visual actual, nos encontramos con un cartón que nos brindaba la posibilidad de pensar y re-crear de nuevo un laberinto. Y los alumnos, dividiéndose el espacio que debían intervenir, se pusieron manos a la obra, como podéis apreciar a continuación.
(Se hicieron cuatro particiones, cada grupo de alumno intervino una zona)


Y el resultado final, nada desdeñable, fue este:

 (Detalle)

  (Detalle)

 (Detalle)

 (Detalle)


Trabajo completo

Para finalizar, algunos de los alumnos han decidido, además, intervenir las señales iniciales que estaban esperando en el Taller del centro a ser eliminadas en breve. Estas son algunas de sus creaciones:

S/T, por Rosa Lumbreras

Sin salida, por Mª Ángeles García Checa

Lo mires por donde lo mires, por Álvaro López

Finalmente, queremos agradecer desde el Departamento de Filosofía al Plan de Familias Lectoras y a la gran generosidad de Antonio Monterroso, principalmente, la oportunidad que han tenido nuestros alumnos y alumnas de disfrutar con esta experiencia tan enriquecedora. Esperamos que ellos y sus familias valoren este tipo de actividades que ponen a su disposición el contacto directo con artistas como Antonio Monterroso, que, por recordar algunos de sus recientes logros, acaba de exponer algunos de sus Poemas Visuales el pasado 12 marzo en la localidad barcelonesa de Castelldefels.

Por @1tristeprofesor